La nicotina y su efecto en el cabello.

La nicotina es una sustancia que muchos conocemos debido a sus efectos nocivos a partir de productos hechos con tabaco. Sin embargo, lo que no conocemos, y que realmente son malos, son los efectos que tiene en nuestro cabello.

Por un lado, puede provocar la constricción de los vasos sanguíneos, lo que disminuye la cantidad de sangre y nutrientes que llegan al cabello, dando como resultado un cabello más fino, débil y quebradizo.

Por otro lado, la nicotina puede dañar los folículos pilosos, que son los responsables de producir nuevos cabellos. Si estos folículos se dañan, el cabello puede comenzar a caerse o crecer de forma desigual.

Otro efecto negativo de la nicotina en el cabello es que puede causar acumulación de sustancias tóxicas en el cuero cabelludo, lo que provoca irritación y descamación, con la posterior aparición de caspa y llegando, en algunos casos a caída del cabello.

Cuando lavamos nuestro cabello con agua demasiado caliente no solo estamos favoreciendo la aparición de sebo, sino que, además, se abren los poros y la cutícula haciéndolo más quebradizo. Por eso, a temperatura correcta es un gran aliado para nuestro cabello. La principal recomendación es que el agua no este demasiado caliente (salvo que lo debamos hacer de manera excepcional), incluso durante el invierno.

Además de estos efectos negativos, la nicotina también puede provocar el envejecimiento prematuro del cabello, ya que puede debilitar la producción de colágeno. El colágeno es una proteína importante para mantener la elasticidad y la fortaleza del cabello.

La nicotina puede afectar la absorción de los pigmentos en la tintura, lo que puede provocar que el color del cabello se desvanezca más rápido o no se fije de manera uniforme. Además, puede hacer que el cabello se vuelva más poroso y difícil de peinar, dejando un cabello opaco y sin brillo.

También puede afectar la decoloración del cabello, ya que debilita la estructura de la fibra capilar y lo hace más propenso al daño. Si el cabello está debilitado, la decoloración puede generar una ruptura a nivel cortex, lo que dejaría un aspecto seco y quebradizo.

En resumen, si sos una fumadora y estás considerando hacer una tintura o decoloración en tu cabello, es importante que tengas en cuenta estos efectos. Si ya te hiciste algún tratamiento y estás experimentando problemas de salud capilar, considera disminuir o dejar de fumar para mejorar su salud y apariencia. También es importante que busques la ayuda de un profesional para tratar los problemas capilares que puedas estar experimentando.

Si tomaste la decisión de dejar de fumar, ante todo… ¡¡¡felicitaciones!!!

Mientras que crece el cabello nuevo libre de nicotina, podes acompañar el proceso devolviendo la nutrición e hidratación original al cabello con algunos de nuestros tratamientos capilares enfocados en ello.

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